Independiente Rivadavia se consagra campeón de la Copa Argentina
En una noche mágica para el fútbol de Mendoza, Independiente Rivadavia se consagró campeón de la Copa Argentina 2025 tras un emocionante encuentro contra Argentinos Juniors. Lo impresionante es que el equipo mendocino terminó el partido con nueve hombres y sufrió la lesión de su arquero, Ezequiel Centurión, pero eso no fue impedimento para brillar en los penales. Todo culminó en el estadio Monumental de Alta Córdoba, donde el héroe de la jornada fue Gonzalo Marinelli, quien atajó dos penales decisivos.
Este triunfo marca un hito importante: es el primer título en la historia del club y además, le garantiza un lugar directo en la Copa Libertadores 2026. Una noche que sin dudas quedará grabada en la memoria de todos los hinchas de la “Lepra”, quienes celebraron con fervor al ver a su equipo alzando el trofeo.
La Copa Argentina se definió en un partidazo
Desde el inicio, el partido se presentó intenso. A los 9 minutos, un centro perfecto encontró a Álex Arce, quien aprovechó un error de el arquero de Argentinos, Sergio “Chiquito” Romero, para abrir el marcador. La hinchada mendocina, que copó uno de los sectores del estadio, estalló de emoción.
El equipo dirigido por Alfredo Berti mostró un gran orden defensivo y sacrificio para mantener la ventaja. Argentinos Juniors, por su parte, buscaba recuperar el control con posesiones largas y presión alta. Pero a los 41 minutos, la Lepra enfrentó un revés: Maximiliano Amarfil fue expulsado con tarjeta roja, dejando a su equipo con diez jugadores.
En el segundo tiempo, con Argentinos empujando para igualar, Independiente sorprendió con una contra veloz. A los 62 minutos, Sebastián Villa realizó una corrida notable y asistió a Matías Fernández, quien anotó el segundo gol para el equipo mendocino. Sin embargo, la alegría fue efímera. Apenas segundos después, Lescano descontó para los de La Paternal con un buen un ataque.
La resistencia de la Lepra fue admirable, incluso tras asumir la salida de Centurión por lesión y la posterior expulsión de Osella, lo que los dejó con nueve jugadores. En un momento de tensión extrema, Erik Godoy logró empujar el balón al fondo de la red en el tiempo adicional, forzando así a un emocionante desenlace desde los penales.
La tanda fue electrizante. Marinelli se convirtió en la figura destacada al detener dos lanzamientos, incluido uno de Tomás Molina, que fue revisado por el VAR por un adelantamiento. Finalmente, Sebastián Villa selló la victoria con el último penal, dándole a Independiente un nuevo lugar en la historia del fútbol argentino.